La APS reclama a todas las administraciones públicas que incluyan en su RPT la categoría laboral de periodista
La Asociación de la Prensa de Sevilla reclama, una vez más, a todas las administraciones e instituciones públicas de Andalucía que incluyan en su Relación de Puestos de Trabajo (RPT) la categoría laboral de periodista o de técnico en comunicación. También les pide que determinen cuántos empleos estructurales deben existir de esta categoría en cada una de ellas, que solo puedan optar a esas plazas licenciados o graduados en periodismo, y que el acceso sea mediante concurso público de oposición, al igual que sucede con el resto de categorías laborales.
La APS hace este nuevo pronunciamiento público una vez que, tras las elecciones autonómicas andaluzas del mes de marzo y las elecciones municipales del mes de mayo, se está produciendo un notable movimiento de entrada y salida de periodistas en la Junta de Andalucía, en las diputaciones y en los ayuntamientos de la provincia de Sevilla y de toda la comunidad. Al no existir en la mayoría de estas administraciones la categoría laboral de periodista en su RPT, el grueso de quienes se incorporan lo hacen como asesores, personal de confianza y eventuales, y no como periodistas, que es la función que van a realizar. Y quienes salen pierden su empleo por la provisionalidad que tenían sus puestos de trabajo, dependientes siempre de los cargos públicos políticos de cada momento en cada administración. Los periodistas son profesionales, al margen del color político que tenga una institución pública.
De manera especial, la APS hace un llamamiento al Gobierno andaluz para que cumpla lo acordado en el Pacto Andaluz por la Cultura, firmado por la Asociación de la Prensa de Sevilla, en el que el Ejecutivo se comprometía a incluir en la RPT de la administración central y periférica de la Junta y en sus empresas y organismos públicos la categoría laboral de periodista o de técnico en comunicación. Esta medida daría estabilidad y dignidad a los profesionales del periodismo y acabaría con la precariedad y dependencia política que actualmente padecen.