Fallece Antonio Colón, socio número 2 de la APS
La Junta Directiva de la Asociación de la Prensa de Sevilla lamenta la irreparable pérdida del periodista y crítico cinematográfico, fallecido en la ciudad de Sevilla a los 92 años. Aquellos que deseen acompañar a la familia en tan difíciles momentos, pueden asistir a la misa que tendrá lugar en la tarde de hoy, 12 de agosto, a las 19.30 horas en el Tanatorio de la SE-30.
(ABC Sevilla). El periodista y crítico de cine Antonio Colón (La Línea de la Concepción, 1922) ha muerto en Sevilla a la edad de 92 años. Antonio Colón, padre de dos hijos, Carlos y Pablo, dedicó toda su vida al mundo del periodismo, primero desde el diario «España», de Tánger, donde trabajó desde 1943 hasta 1966, y a partir de esa fecha, en ABC de Sevilla, donde se jubiló en 1986 como redactor jefe de la sección de Cierre y creó escuela como el crítico de cine más prestigioso e influyente de la ciudad.
Colón, que obtuvo diversos premios a lo largo de su carrera profesional, entre ellos, el de «sevillano del año», estudió en la Institución Libre de Enseñanza y reconoció siempre como maestro en su profesión al periodista y crítico taurino Gregorio Corrochano, al que conoció en la Redacción del diario «España». En Tánger se forjó como periodista y allí coincidió con Eduardo Haro y Emilio Sanz de Soto, entre otros, además de con el autor de «El cielo protector», Paul Bowles.
En 1966 el entonces director de ABC de Sevilla, Joaquín Carlos López Lozano, lo fichó para el periódico en el que se acabaría jubilándose como redactor-jefe de Cierre y donde coincidió con José Antonio Blázquez, Manuel Ferrand y Antonio Burgos, entre otros, y desarrolló la segunda parte de su brillante carrera profesional, que lo encumbró como el más importante crítico de cine de la ciudad y un indiscutible referente nacional para todos los aficionados al séptimo arte.
Liberal, valiente e independiente a más no poder, tenía un sentido del humor «muy serio e irónico, británico», según su hijo Carlos Colón, profesor en la Facultad de Comunicación de Sevilla y que heredó de su padre su afición al cine y a la crítica cinematográfica, que ejerce desde hace muchos años.
Aunque no era «capillita», sí ejerció de nazareno en la ciudad que lo acogió desde que cumplió su primer año de vida y fue hermano del Silencio, el Calvario y la Macarena, cofradía ésta en la que tenía uno de sus números más antiguos.