Con esta excarcelación, en Cuba ‘sólo queda un periodista encarcelado: Albert Santiago Du Bouchet, condenado en abril de 2009 a tres años de prisión’.

“Con la excarcelación de Pedro Argüelles Morán la triste página de la ‘Primavera Negra’ llega a su fin para Reporteros sin Fronteras” (RsF). El último periodista encarcelado desde la ola represiva de marzo de 2003 fue liberado el 4 de marzo de 2011, por lo que en este momento, en Cuba “sólo queda un periodista encarcelado: Albert Santiago Du Bouchet, condenado en abril de 2009 a tres años de prisión por ‘desacato’”.

Reporteros sin Fronteras señala que “las autoridades cubanas han mantenido su palabra” y “el proceso de excarcelación de los 52 presos de la “Primavera Negra”, negociado gracias a la mediación de la iglesia católica cubana y el gobierno español, está casi acabado”.

A pesar de que reconoce que “este fin de la ‘Primavera Negra’ no carecerá de cuestionamientos, a posteriori, sobre el sentido real de la ola represiva y los siete años de encarnizamiento y propaganda de odio que siguieron contra sus víctimas y sus defensores”, la organización de reporteros señala que “el fin de la ‘Primavera Negra’ puede constituir el preludio de una nueva situación de las libertades públicas en la isla, si las autoridades aceptan extraer todas las enseñanzas de esta experiencia”. En este sentido, añade que “se han dado algunas garantías recientes, como el desbloqueo de algunas páginas de Internet”. Aún así, RsF destaca que “la represión física contra los opositores volvió a acentuarse durante el homenaje rendido, un año después de su muerte en prisión, el 23 de febrero de 2010, al disidente Orlando Zapata Tamayo”. Por lo que señala que “tal situación es insostenible” y exige que “el gobierno cubano debe tomar una opción viable para el futuro aceptando el pluralismo”. Esta opción, insiste la asociación, “llama a un diálogo con la sociedad civil y a la legalización de una prensa independiente, fuera del control del Estado”, a la vez que también implica también “la rehabilitación o al menos la amnistía de los prisioneros de conciencia y el derecho a regresar de los exiliados”.

Así como también se informa de que “las autoridades cubanas deben cumplir sus compromisos internacionales ratificando los dos pactos de la ONU relativos a los derechos civiles y políticos que firmaron en 2008”, también señala que “la comunidad internacional debe tomar nota de los progresos alcanzados”, por lo que aprovecha la ocasión para pedir “el levantamiento del injusto embargo impuesto por Estados Unidos a Cuba desde 1962”. Además, RsF propone a nivel europeo, “una reevaluación de la posición común que subordina la normalización de las relaciones diplomáticas al respeto de los derechos humanos en la isla”.