La FAPE reitera su firme compromiso con la defensa de la libertad de prensa
En el día de nuestro patrón San Francisco de Sales, la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) reitera su firme compromiso con la defensa de la libertad de prensa frente a los vetos a medios y periodistas, los recursos a las ruedas de prensa sin preguntas y la exclusión de los profesionales del periodismo de actos de especial trascendencia para la sociedad española.
La FAPE constata que hay un claro intento de convertir nuestro trabajo en irrelevante a fin de imponer la propaganda como norma y evitar la rendición de cuentas a la que están obligados los gobiernos y los partidos políticos y sin la cual la democracia no podría sobrevivir.
Ante esta situación, la FAPE, primera organización profesional de periodistas de España, reivindica el papel fundamental de la libertad de prensa en las sociedades democráticas como dique de contención de los abusos del poder, firme sostén de los valores constitucionales y pilar imprescindible del derecho de información de los ciudadanos.
La FAPE alerta del riesgo de perder la libertad de prensa que tanto costó conquistar y hace un llamamiento a la sociedad para que respalde el libre ejercicio del periodismo, garantía de la supervivencia de la democracia cuando cumple a plenitud su función de ofrecer a los ciudadanos la información que necesitan para tomar sus propias decisiones.
El fomento de una ciudadanía libre, crítica con el poder, sólo se logra a través del periodismo de calidad, es decir, el que promueve información veraz, verificada, contrastada con fuentes fiables y sujeta a las normas de nuestro Código Deontológico.
La información nunca puede ser una mercancía sometida a cotización, a falsificaciones y a manipulaciones. Muy al contrario, el periodismo de calidad es un bien valioso que los periodistas y los medios ponen a disposición de los ciudadanos para impulsar la pluralidad, la convivencia democrática, el progreso y el Estado de Derecho.
La imposición del silencio informativo perjudica no solo a los periodistas, sino también y en especial a los ciudadanos, a los que se priva de conocer a fondo decisiones que pueden condicionar su vida presente y futura. Los ciudadanos dejan de ser soberanos y pasan a ser siervos, a los que se puede engañar fácilmente con mentiras, bulos y hechos alternativos.
En consecuencia, la FAPE reclama a los poderes públicos que pongan fin de una vez por todas a las ruedas de prensa sin derecho a preguntas, supriman los vetos a periodistas y medios y todas aquellas medidas que impiden el libre acceso a la información, entre ellas las que están reflejadas en la llamada “ley mordaza”.
La FAPE insta a los grupos editoriales a que mejoren las condiciones laborales y salariales de sus periodistas. Mal se puede hacer el periodismo de calidad por el que los ciudadanos estarían dispuestos a pagar con redacciones débiles, periodistas mal remunerados y con sus derechos laborales reducidos al mínimo, condiciones que se agravan en los casos de los autónomos, los colaboradores y los becarios.
Igualmente les solicitamos que adopten medidas que levanten las barreras que impiden que la promoción de las periodistas se haga en condiciones de igualdad con los periodistas.
También exhortamos al nuevo Gobierno y al Parlamento a que resuelvan con la máxima urgencia el concurso público en RTVE a fin de que se convierta en un medio de todos los ciudadanos, ajeno a los gobiernos de turno y sin injerencias políticas, exigencias que extendemos a las radiotelevisiones autonómicas, en alguna de la cuales hay un claro incumplimiento de la propia ley que la ampara.