La periodista Rosa María Calaf en los aperitivos La Raza-APS
La veterana corresponsal de TVE tuvo un encuentro con periodistas sevillanos, con motivo del Centenario de la Asociación de la Prensa.
Rosa María Calaf, veterana corresponsal de TVE con una larga trayectoria de casi cuarenta años de oficio, ha departido con un grupo de periodistas sevillanos, en el marco de los Aperitivos de La Raza, organizados en colaboración con la Asociación de la Prensa de Sevilla, con motivo del centenario de su fundación. La periodista catalana ha estado acompañada en este encuentro por la presidenta y la secretaria general de la APS, respectivamente, Nani Carvajal y Pilar Suriñach; por el Director de Explotación del Grupo La Raza, Pedro Sánchez-Cuerda, así como por el también veterano periodista de TVE, Diego Carcedo, que se sumó al acto.
Nani Carvajal, presidenta de la APS, hizo la introducción del personaje destacando la ejemplar trayectoria de esta gran profesional, con un estilo muy personal en sus crónicas como corresponsal de muchos acontecimientos históricos y que la convirtió no sólo en la más veterana sino en la periodista con más experiencia a nivel internacional de TVE. Desplazada a innumerables zonas del planeta, trabajando en ciudades como Moscú, Viena, Buenos Aires, Nueva York, Canada o Roma, su última etapa profesional la desarrolló en la zona de Asia y el Pacífico. Ahí cubrió importantes conflictos o eventos de índole mundial como los Juegos Olímpicos de Pekín en 2008. Calaf ha sido merecedora de numerosos premios, el último de los cuales le ha sido otorgado en la localidad sevillana de Gerena, recibiendo el X Premio periodístico Manuel Alonso Vicedo. La presidenta Nani Carvajal agradeció muy sinceramente a Rosa María Calaf el haber aceptado compartir con los periodistas sevillanos tantas experiencias interesantes vividas en su larga carrera profesional.
Calaf en una espléndida disertación fue desbrozando a preguntas de los periodistas momentos históricos vividos, como la desintegración de la URSS («se demostró que era –dijo- un gigante con los pies de barro»), los graves acontecimientos del Tibet, previos a los Juegos de Pekín («todo Occidente aún vive de espaldas a la auténtica realidad del pueblo chino»), el tsunami que arrasó parte de costa asiática y cuya percepción real fue un caos absolutamente brutal o aquellos primeros cambios democráticos que se produjeron en algunos paises de Hispanoamérica.
Privilegiada y muy afortunada de hacer el trabajo que le gusta, Rosa María Calaf dijo haber vivido siempre el periodismo de verdad, no este sucedáneo que se vive en la actualidad, más siendo mujer «que la capacidad –añadió- no se nos supone». Actualmente, se hace un periodismo muy falto de ética y muy mercantilizado y en el que sólo prima el espectáculo. Fue pionera en los primeros programas con unidades móviles («algo que puede parecer ahora prehistórico»), puso en marcha la TV-3 de Cataluña y ha sido la única que ha permanecido de corresponsal internacional en sus 38 años de TVE.
Calaf explicó que es consciente de haber sido observadora en primera línea de muchos acontecimientos históricos. E insistió en la responsabilidad social de los medios de comunicación, algo que se ha perdido. Sobre el riesgo que pudo conllevar su presencia en muchas zonas peligrosas, Calaf argumentó que ese riesgo es consustancial a la profesión de periodista («tú estás allí porque quieres estar»), estando totalmente en contra de los compañer@s que enzalzan dichas situaciones de peligro de una forma un tanto irreal, «como vendiendo insisto el espectáculo». En estos lugares muchas veces falta preparación y sobra ignorancia e inconsciencia. Antes los corresponsales eran más observadores y ahora somos –dijo- más un objetivo a batir. No obstante, sobre la idea extendida del riesgo que se sufre «en ocasiones hay que ser más valiente ejerciendo el periodismo local que el internacional»
Calaf, en su interesante disertación, explicó que fue en Timor, al sur de Indonesia, donde sufrió un riesgo real, al no estar la situación controlada y existir bastante milicias paramilitares. Y añadió que en la actualidad ese peligro evidente para los periodistas puede estar en México o en Colombia, por la delincuencia local o por los grupos de narcotráfico.
En relación con la realidad actual de la información internacional en televisión dijo una frase para reflexionar: «Ahora importa más estar que saber lo que pasa», que simplemente vean que se está por prestigio de determinadas cadenas aunque no se analice realmente lo que ocurre, algo que banaliza y frivoliza dicha información. Preguntada finalmente qué opinaba de la pretendida desaparición de la publicidad en TVE dijo que «puede sonar bien pero no me gusta nada», tratándose de una cadena pública que ha de dar un servicio a los ciudadanos.